HTC presenta dos visores VR en la Vivecon 2021.

Como todos sabéis, hoy a las 18 horas se ha celebrado el Vivecon 2021, unos de los eventos más esperados de este año, ya que todo hacía predecir que HTC iba a dar el golpe encima de la mesa y plantar cara a la competencia.

Y bueno, se podría decir que no ha dejado indiferente a nadie, ya que, efectivamente, como ya anunciamos en DistritoXR, se han presentado dos visores VR diferentes y cada uno con sus pros y sus contras.

Para no caer en largos textos, aburridos, con lenguaje técnico y poco amenos, que de estos ya encontraréis en muchos sitios, vamos a ir al grano y resumiremos lo que nos interesa de verdad de estos visores presentados por HTC.

Dos visores, dos modos diferentes de ver la VR.

Por un lado se presentó el Vive  Focus 3, la tercera revisión de este producto que nunca había acabado de calar hondo en el mundo VR por diferentes motivos.

Este nuevo visor lleva en su interior el Snapdragon XR2, al igual que su máxima competencia, las Quest 2. Monta unas pantallas LCD que dan una resolución de 2448 X 2448 por ojo, aquí sí que vemos una mejoría con respecto a las Quest. Un FOV muy interesante de 120º, ganando así a lo que venía siendo normal en otros visores que se quedaban en 100º y lo más llamativo, unos nuevos controladores.

Los nuevos controladores, la parte más positiva.

Estos nuevos controladores tienen un diseño muy parecido a los de Oculus y eso nos alegra, ya que dan un resultado buenísimo y se adaptan de maravilla al juego. El punto que crea más controversia quizás sea el precio y es que esta pequeña maravilla saldrá por unos 1300 Dólares. No estaríamos hablando de algo muy exagerado, ya que recordamos que este visor está enfocado al mundo profesional y no al usuario normal. Ya hablamos en su día que la versión profesional de las Quest, las que no necesitaban cuenta de Facebook para su uso, salían a la venta por unos 850 €. Como podemos observar, no es tanta la diferencia si comparamos los materiales y los acabados de estas nuevas HTC.

Eso si, para un usuario de casa, el precio por lo que ofrece, sí que puede parecer algo excesivo.

También se podrá conectar al PC.

También se ha comentado que se podrán conectar a un PC a través de un cable USB, lo que no se ha especificado es si será un cable específico, al estilo Link de Oculus o uno genérico, cosa que dudo.

La función inalámbrica se implementará más tarde, pero no han dado detalles.

Este visor estará disponible el 27 de junio.

HTC Vive pro 2, la otra alternativa.

Por otro lado se han presentado también las nuevas Vive pro 2, unas gafas VR que esta vez sí, necesitan de un PC para su uso.

En esta ocasión tenemos al sucesor de la primera revisión presentada allá por el año 2018 y que no fue un mal visor, pero que no tuvo el éxito que se mereció.

Estas nuevas gafas VR de HTC llevan incorporados dos paneles LCD que nos dan una resolución de 2448 X 2448 por ojo. Una frecuencia de refresco de 120 HZ, no era menos lo que esperábamos y un FOV de 120º, al igual que las Focus 3.  En esta ocasión estamos hablando de un visor VR que tendrá un precio de 1400 Dólares, casi nada.

HTC nos da algunas decepciones.

Aquí ya empezamos un poco con la decepción, ya que se esperaba algo más importante por parte de HTC. No entraremos en sí valen o no ese precio, pero diremos lo que no se puede admitir teniendo ese precio. La calidad del visor es buena y eso está fuera de toda duda, pero no nos pueden poner los mismos controladores que en las Vive originales, Las maracas estuvieron bien en el inicio de la VR, pero hay mejores opciones y no se entiende que no se usen unos controladores como los de las Focus 3, mucho más versátiles.

Es compatible con el sistema inalámbrico Vive y con el rastreador facial recientemente lanzado por HTC, pero realmente este sistema sin cables es cómodo. ¿No hay más tecnología para conectar vía wifi el visor al PC? Recordamos que estos periféricos no son precisamente baratos y si vamos sumando…

Este visor estará disponible también para julio de este año.

Conclusiones.

Pues como conclusión final y si ánimo de hacer leña de árbol caído, creo que es la misma a la que hemos llegado casi todos, una sensación de medio vacío.

Del golpe encima de la mesa que se esperaba de HTC, todo ha quedado en un golpecito con la mano casi sin querer hacer mucho ruido.

Visores buenos, de buena calidad, de los que no dudamos que al usarlos nos gustarán mucho, pero de los que se esperaba, ya no algo más sino algo nuevo, innovador, algo con lo que poder competir y poder decir, si yo valgo esto, pero es que tengo esto, y con lo que nos dan, pues no lo podemos decir. No podemos justificar un precio tan alto, usando el pretexto de que mi plástico es de mejor calidad que el tuyo.

¿Qué podía haber sido?

Pues un sistema inalámbrico nativo, unos mandos innovadores (esto en el caso de las Pro 2), un seguimiento ocular, no sé, algo que nos empujará a realizar un reembolso de semejante cuantía y más aún cuando la competencia viene fuerte, es mucha y lo hacen rematadamente bien.

¿Los resultados? El tiempo y los números hablarán y nosotros estaremos aquí para contároslo.