Facebook será obligatoria para los usuarios de Oculus

Desde que Facebook compró Oculus en el lejano 2014, toda la comunidad de la RV se temió que este momento llegaría.

Y ha llegado.

Como si se tratase del mítico anuncio de Scattergories de los años 90, Facebook anunció anteayer que todos los usuarios de Oculus deberán tener cuenta en su red social para poder utilizar sus dispositivos con una “funcionalidad completa”. ¡O aceptamos pulpo como animal de compañía o se termina la partida!

Los usuarios existentes podrán continuar usando sus cuentas de Oculus hasta el 1 de enero de 2023, momento en el que también deberán abandonar o fusionar su cuenta de Oculus.

Según Facebook, estos cambios están destinados a proporcionar una experiencia de realidad virtual social más fluida para los usuarios de Oculus.

“El uso de un perfil de realidad virtual respaldado por una cuenta de Facebook y una identidad auténtica nos ayuda a proteger nuestra comunidad y hace posible ofrecer herramientas de integridad adicionales”, afirmaron en su blog.

Es evidente que Facebook planea unificar sus dos mercados preparando la llegada de Horizon.

Pero como la noticia ya casi seguro que la conocéis, permitidme que comparta con vosotros algunas reflexiones.

Soy conocido por dar mi opinión en las situaciones en las que no se me pide, así que esta vez no será una excepción.

He leído a ilustres prohombres de las realidades mixtas discutir acaloradamente sobre la oportunidad o no de esta medida. Algunos incluso tildan de ilusos a los que piensan que habría que mantener separados los dos ecosistemas, o al menos, que su unión sea opcional.

Obviamente Mark Zuckerberg es el dueño de la pelota. Se juega con sus reglas o no se juega. 

Lo que si está demostrando Mark (perdona la confianza), es que no se le da bien hacer de árbitro. No hay más que ver los problemas que está teniendo WhatsApp y la meteórica subida de Telegram. 

Dejando de lado las virtudes o carencias de una u otra plataforma de mensajería, muchos usuarios se han cambiado a Telegram por simple rebeldía contra Mark y sus políticas corporativas.

En el terreno de la mensajería hay competencia, pero, ¿y en la realidad virtual?

Pues de momento, NO. Y aquí es donde radica el problema.

Hasta la fecha, solo HTC con su VIVEPORT puede hacer algo de sombra al ecosistema de Oculus. Nada más. Windows Mixed Reality parece que empieza a despertar gracias a las HP Reverb G2 y su Flight Simulator, pero aún están a años luz de la compañía de Mark.

Con un gritón de dólares invertidos en Horizon y con la joya de la corona (su red social Facebook), perdiendo usuarios día a día. Al bueno de Mark se le ha ocurrido la genial idea de poner en contra a la gente que hasta ahora le reía las gracias.

No somos muchos los usuarios de RV, pero si somos exigentes. Queremos más. Es cierto que Oculus es la que ha estado, junto a Sony, tirando del carro de la VR.

También es cierto que si quieres usar los juegos de Sony tienes que tener una cuenta con ellos, pero, ¿acaso las Oculus son una consola? Hasta donde sabemos, para utilizar esos visores (standalone aparte) necesitamos nuestro PC y tenemos más alternativas.

Y es precisamente aquí donde quería llegar. Al tema de los standalone. Se trata más de una premonición que de un dato contrastable, pero vamos, como esta de moda hacer cábalas, las mías son tan válidas como las de los demás.

Pienso que Oculus va a dejar de lado el mundo del PC y se va a centrar únicamente en standalone, convirtiendo sus visores en consolas portátiles y cerrando así la soga en el cuello de una clientela cautiva.

Si es así, ciertamente Mark puede dar el pelotazo en los próximos años, pero se olvida tanto del mercado asiático como de Apple (no creo que se le olvide la verdad).

De cualquier forma van a ser tiempos convulsos en los que habrá que estudiar los flujos migratorios de los usuarios como se hace con las aves en los cambios temporada.

Para terminar, una reflexión personal en cuanto a la seguridad. Facebook no ha aclarado como se gestionará la información en el visor (ya lo harán próximamente), ni como se protegerá nuestra intimidad en el caso de prestar el visor a otro.

Puede que después de dejarle el visor a un amigo o cónyuge, terminemos jugando al Creed sin necesidad de VR.

¿Qué os parece la noticia? ¿Qué opinión os merece?