VIVE Flow ya es una realidad. Después de muchas filtraciones, HTC acaba de presentar su nuevo dispositivo de realidad virtual. Unas gafas inmersivas portátiles, con un objetivo muy de actualidad, el mindfullness.
En un dispositivo destinado a evadirnos de nuestro ajetreado día, es de vital importancia que resulte cómodo para fomentar esa relajación. Las VIVE Flow tienen un ajustado peso de 189 gramos, eso permite que su sistema de sujeción sea muy similar al de unas gafas normales, con dos patillas ajustables que se adaptan a la forma de nuestra cabeza. Las cuales además son plegables para poder transportarlas fácilmente en su estuche.
El facial está inspirado en el de las VIVE Focus 3 y se coloca de forma magnética. Esta facilidad de cambio es ideal si vamos a compartir el dispositivo. Un detalle muy interesante es que incorporan un ajuste para las dioptrías del usuario, de forma que cada individuo pueda disfrutar de su contenido de una manera óptima.
Sabemos que los visores de realidad generan un calor que a veces puede resultar molesto según la época del año, o provocar que se nos empañen las lentes. VIVE Flow incorpora un sistema de refrigeración activo que extrae el aire caliente de tu cara cuando están en funcionamiento.
Sus pantallas de 3.2K de resolución y 75 Hz de refresco, ofrecen un campo de visión de 100 grados. Datos más que suficientes para disfrutar de nuestro contenido multimedia como lo haríamos en una pantalla de cine. Completan los datos técnicos sus 4 GB de RAM y 64 GB de almacenamiento. Dos cámaras para el seguimiento insideout, que permiten el posicionamiento 6DOF en las aplicaciones. Y el procesador que mueve el conjunto es un Snapdragon XR1. Podéis consultar la lista de características técnicas en este enlace.
Si hay algo que aumenta la inmersión y la relajación es el sonido, y estas VIVE Flow incorporan un sistema de audio espacial en 3D, aunque también podrás conectarlas a otros auriculares por Bluetooth. Dispone de unos micrófonos integrados con cancelación de ruido externo para usarlos en nuestras comunicaciones.
¿A quién van dirigidas estas VIVE Flow?
En su presentación HTC enfocaba estas gafas a esas personas que quieren tomarse un respiro durante un ajetreado día y evadirse por tiempo. Intentando que de ese modo aumente nuestro bienestar mental y eso se traslade también a nuestro bienestar físico. Ya hay diversos aparatos tecnológicos enfocados en mejorar nuestra actividad física, pero estas gafas de HTC apuntan directamente el mejorar nuestro bienestar mental, el mindfulness o conciencia plena.
¿Qué podemos hacer con estas gafas?
Podremos avanzar hasta la meditación 2.0, con aplicaciones específicamente diseñadas para este visor. Como el ya conocido TRIPP, que nos permitirá buscar esa relajación con nuestras VIVE Flow.
Podremos ver nuestras series o películas favoritas, transmitiendo la imagen desde nuestro teléfono móvil, pudiendo utilizar la aplicación que nos apetezca. El teléfono también actuará como puntero en la realidad virtual de las VIVE Flow, con él podremos desplazarnos por los menús y seleccionar que contenido queremos ver en las gafas.
Habrá aplicaciones destinadas ejercitar la mente para entrenar nuestra mente. Y también podremos usarlas en VIVE Sync para colaborar y socializar con amigos y compañeros de trabajo.
¿Cuándo estarán disponibles las VIVE Flow y a que precio?
Estas gafas pueden pre comprarse desde ya mismo a través de la página oficial. Las entregas y la venta abierta están previstas para este noviembre. Tendrán un precio de 549 euros y si haces la pre compra te añadirán sin coste el estuche de transporte y 7 aplicaciones para estrenar tus VIVE Flow.
HTC VIVE ofrecerá una suscripción especial a Viveport por 5,99 dólares al mes, que incluirán acceso ilimitado a todo tipo de aplicaciones creadas específicamente para estas VIVE Flow.
Lo que no convence
Aún no hemos podido tener acceso a probar estas gafas, pero encontramos detalles importantes que podrían haberse mejorado.
Las VIVE Flow tienen un peso realmente ligero, pero lo hacen a costa de no incluir batería interna. Deberemos alimentar las gafas con una batería externa, lo cual no parece realmente la opción más cómoda ni elegante. Apenas tendremos 5 minutos de autonomía, lo justo para poder cambiar a otra batería externa en el caso de que se nos esté agotando.
Necesitamos de un teléfono para manejar la interfaz y realizar la transmisión de contenido a las gafas, pero no valdrá cualquier teléfono. De hecho en el lanzamiento no podremos utilizar ningún dispositivo iOS, lo cual descarta a millones de usuarios. Entendemos que es algo que arreglarán con el tiempo, pero parece un fallo enorme que no sea compatible de salida. Podemos comprobar si nuestro teléfono es compatible desde aquí.
Y el gran problema, su precio. Puede que incorpore una buena tecnología y que hayan conseguido una estupenda miniaturización. Pero los 549 € se antojan más o menos el doble de lo que debería costar un visor para una función tan específica. La competencia está poniendo las cosas muy difíciles con respecto al precio, y el usuario final está dando un valor diferente a estos dispositivos al que antaño ofrecía HTC y que insiste en ofrecer.
Obviamente se trata de una opinión personal y no se basa en una prueba tangible del producto, pero es un sentimiento generalizado, el que hubiera sido importante ajustar más el precio de este producto.
Pero lo más importante es, ¿qué os parecen las VIVE Flow a vosotros?
