Hoy os traemos el análisis de Luna para Oculus, un juego desarrollado por Funomena.
Luna nos presenta un cuento interactivo donde un pajarito que descansaba una noche de verano tras la visita de un misterioso búho, se preocupa por recuperar la luna y lo hace cantando…
Y así, nuestro pajarito empieza a viajar visitando hasta 6 lugares donde va creando vida y melodías que incitan a la luna a crecer.
¿Nuestro objetivo principal? Recuperar la luna.
¿Qué nos ofrece Luna?
La luna, el búho y el pajarito
Nos presentan Luna como un cuento interactivo en el que reina la espiritualidad, con el ambiente creado tanto gráfica como melódicamente. Tendremos que ir resolviendo pequeños puzles que tienen la misma base.
Disponemos de 6 escenarios hasta recuperar la luna completa. Cada escenario se divide en dos partes: La primera, en la que tendremos que unir constelaciones que acaban creando un ser de la naturaleza (animal, planta, hongo); que después usaremos en la segunda parte.
En dicha parte, estaremos en un paisaje visto desde fuera y tendremos todos esos elementos que “desbloqueamos” con las estrellas. Ahora toca integrar esos elementos en nuestro escenario hasta que recobre vida y nuestro pajarito empiece a cantar. Al acabar, para sanar tendremos que hacer círculos formados por estrellas y seguirlo con nuestra mano. Puzles que no son nada complicados y solo nos hacen meros espectadores.
La luna empieza a recuperarse…
Gráficos y audio de Luna
Más que los gráficos destaca la atmósfera creada entre diseño y música, creando un relax totalmente acorde con nuestra historia. Aquí no hay prisas. Hay que sentir.
La banda sonora nos parece totalmente acorde con lo que se pretende. Los gráficos, hechos como si estuviéramos dentro de un mundo de papel colorido. Aunque el nivel de texturas es bajo y no existen las colisiones, la magia sí que está presente.
Inmersión
Se trata de un juego en forma de cuento interactivo apto para todos los públicos, al ser estático no produce ningún tipo de mareo.
No es nada difícil, los controles son muy simples y nos basta con interactuar y resolver algún que otro puzle.
Aunque no existen colisiones, sí que podremos interactuar con casi todos los elementos reaccionando ellos a nuestro toque.
Conclusión de nuestro análisis de Luna para Oculus
Como conclusión de Luna, destacamos que es un cuento sencillo, pero calmado y espiritual. Para esos ratos en los que se necesita relax. Quizás para los más cañeros de la VR se quede un poco corto, pero no es eso lo que pretende el juego. Sin embargo, he pensado mucho en quitarme las gafas y dejárselo a mi madre.
Un cuento, música y relax, le vendrán genial para esos ratitos que necesitan evasión.
¿Qué te ha parecido nuestro análisis de Luna para Oculus? ¿Lo has probado?
