Algunos de nosotros hemos vivido una bonita época donde las recreativas poblaban los centros comerciales de las ciudades y, a costa de unas cuantas pesetas, uno podía disfrutar de experiencias de juego que en casa resultaban inaccesibles o de una gama inferior.
Uno de mis momentos favoritos a la hora de visitar Continente (que pasó a llamarse Carrefour) era quedarme con mi hermano mayor jugando a The House of the Dead y Time Crisis, aunque la economía de nuestros padres nunca nos permitiese pasar del segundo jefe.
Ambos juegos se engloban dentro del género shooter sobre raíles. Es decir, tu personaje se movía sólo y tú tan sólo tenías que apuntar y disparar a los enemigos con tu pistola, que contaba con una primitiva tecnología de captura de movimiento. Crisis VRigade 2, el juego que analizamos hoy, recoge esos elementos y los lleva a la realidad virtual y a los dispositivos de control por movimiento a los que tenemos acceso hoy en día.
Esta secuela de Crisis VRigade se encuentra disponible para PCVR, dónde actualmente se encuentra en Early Access y PlayStation VR, que es la versión que hemos podido probar. El desarrollo corre a cargo del estudio español Sumalab.
Jugabilidad
Crisis VRigade 2 es un título arcade que ofrece al jugador 3 misiones distintas dónde deberá atravesar los distintos escenarios disparando a los enemigos hasta llegar al jefe final y derrotarlo. Pero para llevar a cabo la misión no bastará con tener buena puntería como en Time Crisis, sino que deberemos cubrirnos constantemente detrás de las coberturas que nos pondrán a cada paso. Cualquier intento de ir a lo Rambo acabará en una muerte fulminante.
Aparte de estas tres misiones, contamos con contenido extra como una sala de entrenamiento o el Hell Mode, que aumentará la dificultad del título. Se hace patente una falta de contenido inicial que debería ampliarse regularmente con DLC o actualizaciones gratuitas que incluyan nuevos modos.
Lo primero que llama la atención de Crisis VRigade 2 es precisamente la alta dificultad del juego. Tenemos tan sólo 3 vidas para completar cada misión o volver a empezarla desde el principio, y sólo será necesario un disparo para quitarnos una de ellas. Los enemigos tienen bastante puntería, con lo que la mayor parte de la partida la pasaremos parapetados tras objetos, tratando de asomarnos lo menos posible y disparando a ciegas.
Parapetarse también tiene su diversión, ya que nos obliga a agacharnos y levantarnos mucho. Cuando la oposición es abrumadora incluso descubriremos que ya estamos tirados por los suelos casi tapándonos los oídos. La parte física y la inmersión son dos de los puntos fuertes del juego.
Para hacer más accesible la experiencia, existen algunas herramientas para hacer más llevadera la experiencia. Podremos encontrar diversos ítems a lo largo de la partida que, si les disparamos, obtendremos recompensas como tiempo bala o armas más poderosas. Además, con cada intento ganaremos monedas que posteriormente podremos invertir en distintas mejoras como vidas extra o comenzar con diversos beneficios.
Una jugabilidad exigente que forma una mala pareja con la imprecisión de PlayStation VR y sus mandos Move. Acertar sin mirilla es una ardua tarea hecha aposta para aumentar la inmersión, pero hace que apuntar pueda ser una experiencia algo espinosa. Recargar manualmente tampoco es lo más sencillo del mundo, y aunque realizar el movimiento de recargar te hace sentir como John Wick, el tiempo que empleas y la torpeza del usuario y el control hace que parezcas más bien Mortadelo. Yo acabé activando la opción de recarga automática, que lo hace todo más fácil y la vida ya es muy complicada de por sí. Quizás con el Aim Controller mejore, aunque no he tenido la suerte de poder probarlo.
He tenido momentos de frustración al ver que la bala me ha impactado ha atravesado directamente el contenedor detrás del que me encontraba o que mis disparos dan a los enemigos pero no cuenta. Un juego con una alta dificultad ha de ser lo más fiable posible, y Crisis VRigade 2 no siempre lo es.
Gráficos
Gráficamente el juego cumple sin problemas, con unos escenarios que lucen bastante bien y unas armas detalladas, además de una gran variedad de localizaciones diferentes (aunque sin mucho originalidad). Por supuesto, no es lo más puntero del mercado pero las texturas de las coberturas son suficientes para sumar unos cuantos puntos a la inmersión.
Quizás el punto flaco son las animaciones de los enemigos que son un poco ortopédicas o sus diseños poco carismáticos. El apartado artístico flaquea un poco y no dota de ninguna identidad propia al título, que no se diferencia de cualquier otro shooter del mercado.
Sonido
El sonido también está inspirado en las recreativas que mencionábamos. La música electrónica aumenta la sensación de estar en una película policíaca mientras que el ensordecedor sonido de las armas está muy bien implementado. Los avisos por radio del compañero también suenan a la vieja escuela, pero se vuelven tediosos rápidamente. Por suerte, el estudio ha implementado una opción para desactivarlos.
Conclusión
Crisis VRigade 2 es un juego que alarga artificialmente su corta duración con una alta dificultad y un sistema que premia cada intento con facilidades para el siguiente. El problema de este sistema es que puede frustrar a los jugadores recién llegados con una curva de dificultad invertida. Además, el truco se ve rápidamente y no gustará a todo el mundo.
No obstante, quién tenga la suficiente paciencia encontrará una experiencia tensa, inmersiva y divertida a un precio aceptable de 19,99 euros. Un juego para ir directamente a la acción sin complicaciones.
