Mozilla Corporation anunció hoy el despido de aproximadamente 250 empleados para “asegurar el futuro financiero de la empresa”.
Si hace un par de días nos alegrábamos de la llegada del navegador Firefox para PCVR, ahora nos encontramos con este baño de realidad y no de la virtual.
Los empleados se enteraron mediante un correo electrónico enviado por Mitchell Baker, director ejecutivo de Mozilla Corporation y presidenta de la Fundación Mozilla.
Horas más tarde, la noticia se hacía pública y aparecía en distintos blogs.
Según Baker la pandemia de COVID-19 ha desbaratado los planes que tenía la empresa para redirigir la organización en nuevos servicios comerciales que sanearan sus cuentas.
“Hemos hablado sobre la necesidad de cambios, incluida la probabilidad de despidos, desde la primavera. Hoy estos cambios se vuelven reales […] Estamos reduciendo el tamaño de la fuerza laboral de MoCo en aproximadamente 250 puestos, incluido el cierre de nuestras operaciones actuales en Taipei, Taiwán”, dijo hoy el CEO de Mozilla.
Mozilla ha pensado que es buena idea publicar un listado de sus trabajadores despedidos para remarcar sus capacidades y valía. Este “directorio de talentos” será un lugar en el que encontraremos a auténticos maestros de la programación y, en mi opinión, un recordatorio de lo que Mozilla dejó escapar.
Grandes programadores como Imanol Fernández han twitteado la noticia para pesadumbre de la comunidad.
De los aproximadamente 1000 empleados que tenía Mozilla en 2018 han despedido a casi un tercio de sus trabajadores en lo que llevamos de año.
Baker dijo que Mozilla también reconsiderará su modelo de negocio principal y se centrará más en productos financieramente viables.
“Reconocer que el viejo modelo en el que todo era gratis tiene consecuencias, significa que debemos explorar una gama de diferentes oportunidades comerciales e intercambios de valor alternativos”, dijo Baker.
La oferta de VPN que Mozilla lanzó el mes pasado ha puesto el símbolo del dólar en los ojos de más de uno visto el éxito comercial que está alcanzando.
Pero lo que probablemente haya desencadenado esta serie de catastróficas desdichas debe ser el hecho de que Google no renovara su contrato como el proveedor de búsqueda predeterminado dentro de Firefox.
Se ciernen nubes negras sobre el que fue llamado a ser el navegador de una comunidad que ahora deberá empezar a buscar una nueva opción opensource antes de que todo se venga abajo.
Esperemos que la cosa se quede aquí y les deseamos lo mejor a los cientos de trabajadores que tanto han hecho por nuestro querido navegador.