Os presentamos el análisis de Skybinder para Oculus Quest, un rompecabezas en el que tendremos que conectar puntos para formar triángulos con los que conseguiremos resolver la misteriosa figura con forma de animal. El desarrollador de este juego es Maku XR y esta es su página web MAKU XR. Para este análisis se han usado unas Oculus Quest 2.
Jugando
Antes de empezar hay que hacer un sencillo tutorial, aunque está en inglés, es bastante sencillo de aprender cómo se juega. Después, ya tendremos ante nosotros el primero de los rompecabezas. Cada vez que acabamos uno, la figura que hemos creado, se va alejando hacia una especie de portal dimensional y cuando lo cruza, explota como si fueran fuegos artificiales.
Cuando salimos al menú, vemos el total de figuras que hemos conseguido resolver. La primera vez estarán desordenadas, pero cuando volvamos a iniciar el juego, ya aparecerán en orden. Hay un total de 20 figuras.
Mecánicas
Skybinder consiste en conectar puntos. Cada punto tiene un número en su interior, el número indica cuántas veces podemos sacar desde ahí una línea para llevarla hasta otro punto para conectarlos, cuando cierras tres puntos se forma un triángulo y suena un agradable sonido que indica que lo hiciste bien. Cuando te equivocas, solamente tienes que pulsar uno de los botones para eliminar la línea entre dos puntos. Puedes también rotar las figuras y hacerlas más grandes o pequeñas cuando lo necesites.
Sonido
El sonido es minimalista, pero cumple perfectamente su función, te permite relajarte mientras resuelves los rompecabezas. No tiene banda sonora, son pequeñas melodías para darle un toque al juego. Cuando conectes bien un punto, escucharás un agradable sonido y además verás que lo estás haciendo bien porque ya no te permitirá deshacer el punto.
Gráficos
Este apartado no es que sea muy necesario en este juego, pero no podemos pasarlo por alto. Los gráficos de Skybinder son pobres, pero no he necesitado más para tener una experiencia de juego satisfactoria.
Conclusión final
Skybinder es un juego para dedicarle unos ratos para desconectar y relajarte, pero dentro de la realidad virtual no es lo que llamaría un juego, una definición más acertada sería una experiencia.