Análisis de Demeo para PS VR2

El equipo de Resolution Games es todo un especialista en los juegos multijugador para la VR. Cómo no, en el estreno para PS VR2 no iban a perder la oportunidad de llevar fácilmente su juego más popular hasta la fecha: Demeo. Esta adaptación de una partida de rol de tablero lleva ya unos años dándonos muchas alegrías. Desde su lanzamiento, no han dejado de llegar actualizaciones de contenido, sin olvidarnos de una versión en plano para tener más usuarios con los que disfrutar. Así que, esta es la oportunidad perfecta para volver a Demeo con un análisis de esta recién estrenada versión para PS VR2. Preparad vuestros mejores dados, que nos esperan muchas tardes y noches de vicios con los amigos.

Preparando nuestras mejores figuras para el combate

Todos hemos jugado a algún juego de mesa. Los de rol están un paso más allá, permitiéndonos vivir grandes aventuras junto a nuestros amigos mientras nos enfrentamos a los bichos que nos lanza el Dungeon Master. Demeo es la representación de estas partidas en formato de videojuego. El DM es la propia máquina, se enfatiza algo menos la trama, y todo gira en torno a la estrategia. 

La premisa es que un ser malo malísimo ha despertado en las catacumbas, por lo que los héroes de Demeo se deben adentrar en ellas para pararle antes de que desate todo su poder. Hay un total de 5 campañas para jugar, con una ligera conexión entre todas ellas… Pero sólo si nos ponemos a leer su lore. Realmente es algo secundario, ya que todo se resume en entrar a una nueva área para acabar con el villano de turno, quien nos espera al final de la mazmorra. 

Si bien en lo narrativo el juego se podría potenciar un poco más, pero las historias de verdad las vamos a crear nosotros con nuestros compañeros. Las campañas no son más que un marco para vivir nuestras propias aventuras, disfrutando de los retos únicos de cada una de las campañas.

El equipo unido jamás será vencido

En el plano jugable, Demeo es, en esencia, un RPG táctico por turnos. Cada campaña se divide en tres mapas generados de forma procedimental. En los dos primeros nuestra tarea es encontrar al monstruo que tiene la llave de la siguiente área, mientras que en el último piso se encuentra el jefazo al que debemos derrotar. 

Nuestro equipo puede llegar a estar formado por 4 héroes, habiendo 7 entre los que elegir. Todos representan las clases típicas del rol, como el tanque para proteger a los demás personajes, el mago para aplicar efectos elementales en los enemigos, el bardo para dar soporte y fastidiar a los rivales con sus historietas, o el bárbaro para ser la punta de lanza de nuestra ofensiva. Todos tienen habilidades que los hacen únicos, por lo que debemos conocer sus puntos fuertes para aprovechar todo su potencial.

En cada turno, podremos realizar dos acciones, ya sea movernos o atacarnos. Además, podemos usar las cartas que tengamos en nuestra mano. Éstas pueden ser ofensivas, de curación, o nos darán las habilidades propias de cada héroe. Las más poderosas pueden llegar a costar los dos puntos de acción, pudiendo cambiar las tornas de la batalla si las usamos con cabeza. Algunas, como las básicas del personaje, se regeneran tras cierto número de turnos, pero las otras se consumirán. ¿Cómo conseguimos más? Al “subir de nivel” matando enemigos, o abriendo cofres repartidos por la mazmorra. Eso sin olvidarnos de comprarlas en el tendero entre pisos, claro.

Un poco de cuartelillo, Dungeon Master

Hay que jugar con mucho, mucho cuidado, ya que Demeo no es un juego sencillo en absoluto. Estamos ante un RPG táctico donde los enemigos vendrán a por nosotros en manada. Si nos descuidamos y abrimos demasiadas salas, todos sus enemigos vendrán a por nosotros por todos los lados imaginables. En algunos casos, si tenemos las cartas apropiadas, puede ser justo lo que queramos. Una buena explosión aprovechando efectos elementales puede destruir a todo un escuadrón de monstruos… O dejarnos a nosotros tocados. Lo siento compañeros, que ese hechizo sonaba espectacular en mi cabeza hasta que el fuego amigo indirecto nos mandó de vuelta al inicio de la mazmorra.

En cada campaña nos esperan enemigos y obstáculos únicos, por lo que junto al factor aleatorio, cada partida de Demeo logra ser única. Al sumar el azar al tirar los dados, no hay nada seguro nunca. Si RNGesus no está de nuestra parte, por muy brillante que sea nuestra táctica, nos iremos al otro barrio en menos de lo que canta un gallo.

Esto da pie a las risas con los amigos. Porque sí, podemos jugar en solitario y disfrutar de un RPG táctico excelente. Pero la magia de Demeo está al jugar con otros usuarios. Adaptarnos a lo impredecible que puede ser nuestro amigo que sólo sigue la táctica de “Leeroy Jenkins“. Tirarnos de los pelos por el “configuraciones” que se tira pensando lo que hacer en su turno durante una eternidad. O sencillamente, los gritos para ponernos de acuerdo sobre por dónde ir, qué hacer o hacer una tirada mala que da al traste con todos nuestros esfuerzos.

La comunidad de usuarios es excelente, encontrando partida fácilmente (sobre todo con angloparlantes, cómo no) gracias al Cross-Play entre las demás plataformas VR y las versiones en plano. De hecho, en PS5 podemos jugar como queramos, siendo una lástima no tener un multijugador dual entre el usuario en PS VR2 y el que juega en el monitor… ¿Quizá para cuando se implemente el modo PvP? Sea como sea, hay herramientas para comunicarnos en caso de no entender a los demás compañeros, como escribir runas en el aire (¡viva la mímica!), o sencillamente, mover las manos. 

Es entonces cuando se da la magia de replicar esas partidas de Dragones y Mazmorras con los amigos. Pero ahora, todo cobra vida ante nuestros ojos. Las figuras se mueven como en el ajedrez de Harry Potter, el escenario aparece como por arte de magia y se plasman esos duelos de fantasía tan épicos que teníamos en nuestras cabezas. Encima sin recoger nada después de horas de partidas, lo cual es un plus.

Cada campaña nos puede durar fácilmente entre 90 minutos y 3 horas, en función de lo bien que se nos dé. Tenemos 5 en total, cada una es muy rejugable en función de con quién nos adentremos en las mazmorras y su propia distribución. Vamos, que Demeo es prácticamente infinito, y desde Resolution Games prometen que seguirá creciendo a lo largo de este año con más actualizaciones gratuitas. 

Las no-novedades de PS VR2

En su salto a PS VR2, Demeo no es que haya nada diferencie esta de las demás versiones. Se ha implementado el uso de los gatillos adaptativos para que coger cartas, figuras o dedos sea algo más físico, lo cual hace todo más inmersivo y natural. El visor también vibrará en ocasiones contadas… Pero ya. Se había comentado antes del lanzamiento el uso del tracking de ojos para escoger cartas, pero no he llegado a ver esta opción por ningún lado.

Desgraciadamente, hay un aspecto que se ha perdido respecto a Meta Quest 2/Pro: Heroes’ Hangout. Es básicamente una zona social donde poder participar en varios minijuegos, leer los libros de cada campaña, o la actividad más divertida de todas: ¡pintar las figuras! Luego no se usaban en las partidas, ya que los únicos elementos estéticos que se cambiaban iban asociados a nuestro rango, pero vaya si no llegaba a ser relajante. Ojalá también acabe llegando a PS VR2.

La partida de rol más inmersiva de la historia

En lo visual, la versión de PS VR2 está a la altura de la de PC. Todo se ve mucho más detallado que en Meta Quest 2/Pro, ofreciendo unos escenarios y personajes realmente vistosos. El apartado artístico clava lo que debería ser una partida de rol de tablero. El diseño los mapas, las criaturas y los propios personajes es soberbio. Al poder hacer zoom hasta el máximo, podremos ver hasta su más minúsculo detalle, como si entráramos de lleno en este mundo de fantasía. 

La imagen es muy nítida, los colores están realmente vivos, y todo fluye de maravilla. Algo que aporta mucha inmersión es que, por defecto, no sólo veremos el tablero. También veremos el sótano en el que estamos jugando. La interfaz está muy bien pensada, para tener siempre toda la información al alcance literalmente de nuestra mano. Vamos, que Demeo entra muy fuerte por los ojos.

Con el sonido ocurre lo mismo. Tenemos melodías de corte de fantasía muy potentes para hacer las partidas más dinámicas. Las voces en inglés de los personajes, para las pocas líneas de diálogo que hay, no están nada mal. Todo está pulido al máximo, algo que siempre se agradece.

Conclusión

Demeo siempre ha sido un verdadero come-horas. Una de las mejores experiencias cooperativas que podemos disfrutar en Realidad Virtual (o en plano), e incluso un RPG táctico a lo X-COM de lo más divertido al jugar en solitario. Resolution Games tiene aquí una joya increíble, y el salto a PS VR2 ha sido fantástico. El uso de los gatillos adaptativos hace que todo sea más físico de lo que ya era, para que agarrar cada figura o cartita dé mucho gustillo. 

Al sumar lo bien que se ve, todo el contenido que ofrece y lo rematadamente divertido que es, queda claro que Demeo es una de las grandes joyas del lanzamiento de PS VR2. Ser una experiencia estática también la hace ideal para cualquier tipo de usuario, ya seamos veteranos o unos novatos de la Realidad Virtual. Salvo que ya lo tengáis en otras plataformas o no os guste para nada el rol, Demeo es el juego perfecto para pasar muchas tardes de mazmorreo con nuestros amigos. 

Ficha técnica:

• Desarrollador: Resolution Games
  
• Distribuidor: Resolution Games
• Plataforma: PS VR2, Meta Quest 2/Pro, PCVR, PICO 4
• Género: Rol táctico, multijugador cooperativo
  
• Idiomas: Textos en castellano y voces en inglés
• Fecha de salida 22/02/23
• Precio: 39,99 €
• Intensidad: Nula