Cult of the Lamb es un videojuego desarrollado por Massive Monster y publicado por Devolver Digital en el año 2022. Este adorable, y a la vez siniestro título, nos proporciona la mezcla perfecta entre los videojuegos de construcción y gestión de recursos (al más puro estilo Animal Crossing) y los de exploración de mazmorras (roguelike). Y es que tras el rostro simpático que nos ofrece el título se esconde una auténtica reflexión acerca del poder, la lealtad, la religión y el sacrificio, algo de lo que merece la pena reflexionar ahora que ha añadido recientemente el juego cooperativo.
Una crónica siniestra
La odisea de nuestro cordero comienza tras ser sacrificado por una secta oscura. Tras morir, nos encontramos con un ser oscuro llamado “Aquel que espera”, el cual nos ofrecerá un trato. A cambio de devolvernos a la vida, deberemos crear un culto en su nombre, para así derrotar a los cuatro poderosos obispos que lo encadenaron. A partir de entonces nos enfrascaremos en la construcción de una secta, reclutando a todos aquellos adeptos que podamos mientras nos enfrentamos a los esbirros de los obispos, repartidos en cuatro localizaciones distintas.
Sin embargo, nuestros adeptos nos pondrán en más de un apuro, contrayendo enfermedades, muriendo e incluso revelándose contra nuestra autoridad. Deberemos prestar especial atención a las disidencias e intentar paliarlas antes de que se propaguen. Los obispos no nos lo pondrán fácil, ya que también lanzarán maldiciones sobre nuestro culto, obligando incluso a nuestros compañeros más fieles a traicionarnos.
De la misma manera, a lo largo de nuestra aventura podremos visitar otras localizaciones, pudiendo conocer a diferentes personajes con los que interactuar, ya sea comerciando e incluso apostando en partidas de dados. Todos estos elementos (y algunos más) fueron los que en su día hicieron que Cult of the Lamb se abriera un gran hueco entre la gran cantidad de propuestas indie que encontramos hoy en día.
Una combinación de géneros perfecta
Como bien comentamos antes, Cult of the Lamb mezcla dos géneros muy distintos entre sí de una manera muy homogénea: por un lado, la construcción y gestión de nuestra secta. Es decir, reclutar adeptos para que nos ayuden a construir edificios, talar árboles, etc. Conforme se va desarrollando la secta, se puede mantener un estilo de vida autosuficiente, ya que los mismos adeptos podrán encargarse de cultivar y cosechar su propia comida, cocinar, realizar mantenimientos y limpiezas, etc. Además, deberemos garantizar a nuestros compañeros un lugar cómodo donde descansar, comida suficiente y de calidad, un entorno agradable e idílico, y la atención suficiente como para que no alberguen duda alguna de su lealtad hacia nosotros.
Por otro lado, la exploración de mazmorras tan característica de otros títulos, como por ejemplo Hades, es otro de los pilares centrales del juego. Nos deberemos enfrascar en diferentes expediciones a través de puertas que nos conducirán a nuevos territorios. Encontraremos una gran diversidad de enemigos y mini jefes y, tras completar cuatro vueltas en cada una de las puertas, podremos enfrentarnos al enemigo final, uno de los obispos que encadenaron a “Aquel que espera”.
Para ello, dispondremos de diferentes armas y maldiciones que podremos ir mejorando con los avances de nuestro culto. Desde pesados martillos a rápidas dagas, pasando por hechizos de protección y las más destructivas de las maldiciones. También encontraremos personajes dispuestos a ayudarnos en nuestra aventura, como por ejemplo “La tarotista”, la cual nos premiará con una carta del tarot que mejorará a nuestro personaje con mayor o menor acierto. También tendremos la oportunidad de recolectar recursos, conocer personajes e incluso reclutar nuevos adeptos para nuestra secta mientras nos deshacemos de nuestros enemigos.
Adaptado para todos los públicos
Podremos escoger la dificultar al inicio de nuestra aventura para modificarla al gusto a lo largo de la partida. Además, desde el pasado mes de agosto del 2024 podremos disfrutar de la experiencia junto a otra persona, ya que se ha implementado el modo cooperativo en el cual invocaremos a una cabra negra que nos podrá ayudar tanto en la gestión de la secta como en las diferentes mazmorras del juego.
La experiencia cooperativa siempre suele ser más divertida, y este caso lo reafirma. Al jugar con ambos personajes aparecerán nuevas cartas del tarot, las cuales darán bonificaciones por luchar juntos o separados. Además, si caemos en combate nuestro aliado podrá resucitarnos a cambio de un corazón, y en el caso de que no sea posible, resucitaremos tras terminar de eliminar a los enemigos de la habitación. Además, gracias al segundo jugador podremos construir, talar o cosechar nuestros alimentos a un ritmo más rápido, ya que cuatro manos cunden más que dos. El modo cooperativo solo funciona de manera local, es decir, jugando en la misma consola como en los viejos tiempos.
Conclusiones de Cult of the Lamb
Cult of the Lamb es un videojuego único que ha apostado por algo novedoso, como mezclar dos géneros totalmente opuestos con gran acierto. Su estilo siniestro, y a la vez simpático, nos mantiene pegados a la pantalla. Además, gracias a los diferentes grados de dificultad, así como a su modo cooperativo, es un título accesible para toda clase de públicos, desde los jugadores más casuales hasta las más exigentes.
En una época en donde abundan los metroidvania y los soulslike, podemos decir sin lugar a dudas, que Cult of the Lamb es una de las propuestas más frescas y originales del panorama indie reciente. Y ahora, gracias a la implementación de este modo cooperativo, vuelve a la palestra para seguir proporcionando horas y horas de juego adictivo, solos o en compañía.
