En el análisis de hoy os traemos a Flow Weaver para Oculus, un juego que mezcla magia y dimensiones y que viene desarrollado por Stitch Media y Silverstring Media.
¿De qué trata Flow Weaver?
Magia y dimensiones llenas de puzles por resolver. Nos podemos en la piel de una tejedora de flujo, un poco chillona por cierto, que tiene el poder de moverse entre dimensiones. De repente se encuentra perdida en una dimensión desconocida y nuestro objetivo será salir de allí.
Para ello debemos encontrar unas runas que iremos depositando bajo nuestro asiento y que nos ayudarán a salir, ¿o no? El juego es un estilo de scape room y si te gusta esta dinámica te gustará el juego.
Flow Weaver está lleno de diálogos que nos ayudarán a entender mejor el concepto, aunque están en inglés, eso sí, con subtítulos en español.
¿Cómo se juega?
La mecánica del juego se basa en jugar sentados por norma, de hecho si nos movemos, el juego nos lanza un aviso para que volvamos al sitio. Al principio parece un poco agobiante esta sensación de tener tantas cosas para interactuar y que no podamos alcanzar a casi nada, pero eso dará paso a la magia y a qué nos comamos un poco la cabeza para salir de allí.
Iremos abriendo dimensiones mientras vamos resolviendo puzles, que será nuestro objetivo principal.
Cuando tengamos otra dimensión abierta, para viajar a ella debemos usar nuestra energía y estirar para abrirla, un efecto que han logrado por completo y que visualmente queda muy logrado.
Además tenemos un poder: la meditación, con la que logramos que a través de la magia resalten objetos que podremos usar, aunque no sabremos ni cómo ni cuándo, pero sí que habrá que usarlo. Como si de pequeñas pistas se tratara.
Gráficos y audio de Flow Weaver
El apartado artístico de Flow Weaver nos gusta bastante, con unos escenarios detallados y unas texturas buenas. Tanto los gráficos como el sonido ambiente ayudan a crearnos a nosotros mismos dentro del juego. Todos los elementos del juego tienen la misma calidad gráfica aunque algunos escenarios están más detallados que otros cambiando mucho la paleta de color de unos a otros.
Cada dimensión es un mundo completamente diferente al resto y lleno de detalles, visualmente muy bonito ese contraste de mundos.
Lo más conseguido son los efectos visuales que han conseguido a través de la energía, como el de cambiar entre dimensiones.
El sonido y la atmósfera mágica creada también es algo muy trabajado en Flow Weaver con una banda sonora original compuesta por Devin Vibert.
Inmersión y confort
En cuanto al confort no podremos tener queja, puesto que se juega sentado por norma. No podremos movernos de nuestro asiento o el juego nos lanzará un aviso. Por lo tanto no existen los mareos en este juego.
Gracias a los gráficos y el sonido ambiente la inmersión está asegurada.
Aunque las colisiones fallan un poco, y es algo que tenemos muy en cuenta cuando hablamos de VR.
Conclusión de nuestro análisis de Flow Weaver para Oculus
Si te gustan los juegos tipo “scape room” no puedes dejar de probarlo, sin embargo si eres persona de más acción te vas a sentir postrado en una silla con un juego lento.
La idea de fluir energía entre dimensiones está muy lograda haciéndonos pensar qué debemos usar de tal dimensión en la otra para desbloquear el siguiente paso. O qué podemos hacer en nuestra dimensión para que se vea reflejado en otra.
El juego tiene una duración aproximada de 2-3 horas, pero eso dependerá también de cuánto de rápido seamos resolviendo los puzles.
Los puzles no tienen dificultad, pero a veces no son nada evidentes y puedes quedarte sentado esperando a que llegue alguna inspiración.
El precio en Oculus de Flow Weave Oculus de Flow Weaver es de 19,99 €.
¿Qué te ha parecido este análisis de Flow Weaver para Oculus?¿Te gustan este tipo de juegos?
